Las dietas bajas en grasas están de moda en el mundo occidental, donde muchos intentan seguir los consejos médicos de mantener un consumo bajo de grasas y evitar los fritos. Sin embargo, hay una grasa que mucha gente necesita consumir más: los ácidos grasos omega-3. Estos ácidos grasos son importantes para el funcionamiento del cerebro y las articulaciones, y desempeñan un papel vital en la salud.
¿Qué son los ácidos grasos Omega-3?
Los ácidos grasos omega-3 son insaturados y están presentes en diversos alimentos naturalmente grasos, como el pescado, los frutos secos y las semillas de lino. Los ácidos grasos omega-3 más conocidos son el DHA y el EPA, ambos presentes en el pescado. Otro ácido graso omega-3 es el ALA, presente en frutos secos y semillas como la linaza.
Los omega-3 tienen diversos efectos positivos para la salud, pero no están presentes en cantidades suficientes en la dieta occidental. Por eso los médicos recomiendan a menudo tomar un suplemento con estos aceites saludables. Se ha descubierto que favorecen el buen funcionamiento de las articulaciones en personas con artritis, mejoran la salud cardiovascular y protegen contra la inflamación celular. Aunque todos estos son efectos positivos, nuevos estudios sugieren que el verdadero beneficio de los omega-3 puede estar relacionado con la función cerebral y el estado de ánimo.
Los ácidos grasos omega-3 y la depresión
El Trastorno Depresivo Mayor (TDM) es uno de los tipos más graves de depresión clínica, así como uno de los más difíciles de tratar. Las personas que padecen esta enfermedad sienten una tristeza generalizada que afecta a todos los ámbitos de su vida. Aunque hay muchos antidepresivos disponibles, puede ser difícil encontrar una dosis lo suficientemente alta como para tratar los efectos de esta enfermedad y a la vez lo suficientemente baja como para minimizar los efectos secundarios. Un nuevo estudio sugiere que tomar un suplemento de omega-3 puede ayudar a las personas que padecen TDM.
En este estudio, los investigadores descubrieron que los omega-3 tenían un efecto similar al de los antidepresivos en las personas con TDM. Y lo que es mejor, estos ácidos grasos de cadena larga pueden tomarse junto con antidepresivos, lo que podría duplicar los efectos de mejora del estado de ánimo. La mayoría de los antidepresivos aumentan la cantidad de serotonina circulante, la hormona asociada a la felicidad. Los omega-3 parecen aumentar la sensibilidad de los receptores celulares a la serotonina, permitiendo que los mayores niveles circulantes de esta hormona tengan un efecto aún mayor. Además, el efecto de los ácidos grasos omega-3 sobre los receptores de serotonina puede mejorar el estado de ánimo de personas que ni siquiera están tomando antidepresivos.
Las grasas insaturadas y el Alzheimer
Una ligera disminución de la memoria y las capacidades cognitivas es normal en el envejecimiento. Sin embargo, las personas con enfermedad de Alzheimer y otras formas de demencia sufren pérdidas que son anormales y tienen efectos negativos en casi todos los ámbitos de su vida. En la enfermedad de Alzheimer, la mayoría de los efectos se deben a la pérdida de neuronas, especialmente las que tienen receptores de acetilcolina. La acetilcolina es esencial para la función cerebral, por lo que la incapacidad de responder a esta neurohormona puede afectar a la cognición y a casi todos los aspectos de la vida del paciente.
Una nueva investigación da esperanzas a los enfermos de Alzheimer al descubrir que la ingesta de ácidos grasos omega-3 parece tener un efecto protector sobre las neuronas. Las personas que toman un suplemento de omega-3 obtienen mejores resultados en las pruebas de memoria y muestran menos síntomas de Alzheimer y otros trastornos cognitivos relacionados con la edad. Este estudio sugiere que todos podemos proteger nuestro cerebro tanto del envejecimiento natural como de las enfermedades degenerativas tomando un simple suplemento de aceite de pescado.
Hay muchos medicamentos nuevos y sorprendentes en el mercado, pero la investigación está descubriendo una y otra vez que las claves para controlar algunos problemas de salud ya están a disposición del público. Ciertos suplementos dietéticos pueden mejorar la salud de forma comparable a algunos “medicamentos milagrosos”, pero con menos efectos secundarios y menos gasto. Los omega-3 parecen ser importantes para mantener un buen estado de ánimo y una función cognitiva elevada, por lo que este suplemento debería formar parte de nuestro régimen diario de salud.