¿Ha oído hablar alguna vez del Tantra? Si está buscando una forma de mejorar su vida sexual, esta práctica puede ser adecuada para usted, ya que ofrece muchos beneficios.
¿Qué es el Tantra?
El tantra es un antiguo sistema de creencias que se originó en la India hace más de 6.000 años. Surgió como una forma de rebelión contra las religiones dominantes de la época, que dictaban que había que renunciar a los placeres terrenales para alcanzar la iluminación y la verdadera felicidad. El objetivo de las prácticas tántricas es básicamente conectar con un poder superior a través de medios cotidianos. Según este sistema de creencias, los actos placenteros del mundo mundano, como la danza, el trabajo creativo, la comida y el sexo, eran formas de conectar con el mundo espiritual. El tantra contrastaba con los ideales ascéticos de otros sistemas de creencias de la época.
El Tantra es un complejo sistema de creencias espirituales. A medida que el Tantra se ha hecho más y más popular en el mundo occidental, también se ha ido malinterpretando cada vez más. Cuando la mayoría de los occidentales piensan en “Tantra”, piensan en sexo tántrico. El sexo tántrico es una filosofía sobre hacer el amor que puede ayudarle a recuperar el placer puro y la intimidad con los que puede haber perdido el contacto. Sin embargo, en realidad, los ritos sexuales del Tantra sólo fueron practicados por una pequeña minoría de seguidores a lo largo de la historia.
Aunque el Tantra es mucho más que sexo, es absolutamente posible utilizar los principios del sexo tántrico para aumentar la libido y crear más placer y felicidad en la propia vida. No es necesario ahondar en la espiritualidad esotérica del Tantra para utilizarlo en la práctica, ni es necesario creer en ninguna de las deidades del panteón indio. Las técnicas del sexo tántrico pueden ser practicadas por cualquier pareja que quiera intentarlo.
¿Cómo utilizar el Tantra para mejorar nuestra vida sexual?
Hay un par de principios tántricos básicos que se pueden poner en práctica fácilmente. El primero es ir más despacio y disfrutar de cada momento de placer. Cuando la mayoría de la gente hace el amor, hay un principio y un final definitivos, y hacen el amor con el objetivo del orgasmo en mente. Sin embargo, en el sexo tántrico, se experimenta el placer por sí mismo, sin intentar alcanzar el orgasmo a propósito. De hecho, muchos practicantes tántricos retrasan intencionadamente el orgasmo para prolongar la dichosa unión sexual. En lugar de intentar “excitarse”, el objetivo del sexo tántrico es conectar profundamente con la pareja y experimentar de verdad la exquisitez del placer sexual sin prisas.
Al practicar sexo tántrico, es importante permanecer en el momento presente sin distraerse. Procure reservar al menos una hora para practicar sexo sin interrupciones ni preocupaciones. Otra forma de ir más despacio y disfrutar de verdad es resistir la tentación de respirar agitadamente. Los besos lentos y las caricias tiernas son muy importantes para aumentar la excitación y la intimidad.
El otro aspecto más notable del sexo tántrico que puede utilizar en su relación es el enfoque en torno al ritual. El sexo tántrico hace hincapié en lo útil que puede ser un ritual previo al sexo. Un ritual puede ser una forma de relajarse, conectar con la pareja y crear expectación. También puede ser agradable en sí mismo.
Por supuesto, los rituales varían de una pareja a otra. Por ejemplo, bañarse juntos, comer juntos, respirar profundamente o meditar juntos, o simplemente mirarse a los ojos. Estos rituales fomentan la intimidad y pueden servir como juegos preliminares. También pruebe a decorar la habitación de forma romántica o a ponerse lencería sexy para crear aún más ambiente. Hay muchos recursos en Internet con muchos más consejos para crear una experiencia de sexo tántrico.
La anticipación creada por los juegos preliminares y los rituales del sexo tántrico puede disparar la libido, aunque no crea que le apetezca. Después de practicar sexo tántrico, puede que se dé cuenta de lo que se ha estado perdiendo. No hay ningún riesgo en probarlo, y podría suponer una gran diferencia en su satisfacción sexual.