¿Cómo es la vida cuando no se puede dormir bien? Las personas con trastornos del ritmo circadiano lo saben muy bien. Este tipo de trastornos del sueño puede afectar a todos los aspectos de la vida de una persona e incluso tener un efecto crucial en el riesgo de padecer enfermedades graves como cardiopatías y cáncer.
Trastornos del ritmo circadiano: Algo más que insomnio
Aunque casi todo el mundo padece insomnio en algún momento de su vida, los trastornos del ritmo circadiano son más graves y difíciles de tratar. En estos trastornos, el organismo del paciente no libera las hormonas del sueño, la vigilia y otras actividades cotidianas en el momento adecuado. El resultado es que las personas pueden sentirse cansadas cuando se supone que deberían estar trabajando, o están completamente despiertas cuando es hora de dormir. Esto puede provocar fatiga, depresión y diversos efectos sobre la salud.
En general, no se conoce bien el mecanismo de estos trastornos, pero los investigadores han identificado varios genes detrás de los trastornos del ritmo circadiano. En una persona sana, el núcleo supraquiasmático del hipotálamo procesa información como los niveles de luz y la temperatura. Se liberan hormonas para que la persona tenga sueño, esté más despierta, tenga hambre o lo que necesite en ese momento del día. En una persona con estos trastornos, estas hormonas se liberan en el momento equivocado, en cantidades inadecuadas o no se liberan en absoluto.
Tipos de trastornos del ritmo circadiano
Existen múltiples tipos de trastornos del ritmo circadiano, cada uno de los cuales requiere tratamientos diferentes y un enfoque único. Los dos más comunes, el trastorno por turnos de trabajo y el jet lag, son el resultado de un estilo de vida que entra en conflicto con el ritmo circadiano. En el trastorno del trabajo por turnos, las personas que trabajan por la noche u otras horas extrañas empiezan a tener problemas para conciliar el sueño o mantenerse despiertas cuando lo necesitan porque no duermen ni se despiertan a las horas “normales”. En el trastorno por jet lag, una persona que viaja a una nueva zona horaria puede tener efectos físicos como fatiga y pérdida de memoria debido al cambio de señales ambientales como la luz.
También existen trastornos circadianos del sueño que no están causados por el entorno. El trastorno del sueño de fase retardada es frecuente en adolescentes y adultos jóvenes. En este trastorno, la sincronización del ritmo circadiano se desplaza de modo que las personas no pueden conciliar el sueño hasta muy tarde por la noche. Si además no pueden dormir hasta muy tarde, sufrirán los efectos del insomnio y la fatiga. El trastorno del sueño de fase avanzada es justo lo contrario. En este trastorno del sueño, que suele afectar a las personas mayores, las personas sienten sueño muy temprano por la noche y se despiertan temprano por la mañana. Existen incluso trastornos de sueño-vigilia de no 24 horas en los que el reloj interno no está ajustado a las 24 horas normales.
Tratamiento de los trastornos del ritmo circadiano
Los trastornos circadianos del sueño pueden provocar cansancio, exceso de emociones e incluso alterar el pensamiento. Además, pueden aumentar el riesgo de padecer enfermedades graves con la edad. Sin embargo, existen muchos métodos para tratar estos trastornos. Muchas personas pueden dormir mejor tomando un suplemento de melatonina. Dado que la melatonina es la hormona que se libera para que la gente tenga sueño, tomar este suplemento puede ayudar a las personas que tienen problemas para conciliar el sueño cuando llega la hora. La terapia con luz brillante durante el día también ha demostrado ser útil. Ciertas longitudes de onda de la luz indican al cerebro que es de día, lo que estimula la producción de hormonas de la vigilia.
Antes se consideraba que las personas con trastornos del ritmo circadiano eran perezosas o incluso enfermos mentales. Sin embargo, la medicina moderna reconoce estos trastornos como una enfermedad física con diversos tratamientos eficaces. Recibir tratamiento para un trastorno del ritmo circadiano permite a muchas personas recuperar una gran energía y una buena salud general.