Aunque los bajos niveles de satisfacción sexual y libido suelen considerarse problemas de salud en sí mismos, rara vez ocurren sin motivo, sino que suelen ser un síntoma de un problema subyacente. Si estos problemas subyacentes pueden resolverse, o al menos aliviarse, es probable que su vida sexual rejuvenezca. He aquí 10 de los problemas médicos más comunes que pueden perjudicar su vida sexual.
1. Artritis
Cuanto más grave sea la artritis, más probabilidades habrá de que los síntomas afecten a su vida sexual. Los analgésicos de venta sin receta pueden aliviar el dolor articular, pero también debe consultar a su médico sobre cómo tratar esta enfermedad. Para que las relaciones sexuales con artritis resulten más cómodas, hay que cambiar de postura con frecuencia. Dado que las personas con artritis deben evitar los movimientos repetitivos y de alto impacto, la pareja que padece esta enfermedad debe ser la físicamente pasiva durante las relaciones sexuales.
2. Asma
El asma puede dificultar la tolerancia a la actividad física, especialmente a la actividad física de larga duración. Puede facilitar las relaciones sexuales con asma evitando mantenerlas durante demasiado tiempo y, posiblemente, eligiendo posturas sexuales que le permitan ser la parte pasiva de la pareja. Estas precauciones harán que el sexo sea menos exigente físicamente. Además, hable con su médico sobre los medicamentos preventivos contra el asma.
3. Problemas de espalda
El dolor de espalda es extremadamente frecuente. Puede afectar hasta al 80% de la población. Naturalmente, debe hablar con su médico si experimenta un dolor de espalda lo bastante intenso como para perjudicar su vida sexual. Esta dolencia puede aliviarse con medicación, ejercicios y, a veces, suplementos dietéticos. Se necesitan tratamientos más invasivos o serios si el dolor de espalda es consecuencia de una lesión o trastorno de la columna vertebral. Si el dolor de espalda persiste a pesar del tratamiento, sólo tiene que encontrar la postura sexual más cómoda.
4. Depresión
La disminución del deseo sexual es una queja muy común entre las personas con depresión. De hecho, más del 70% de las personas con depresión manifiestan una disminución del deseo sexual. Hable con su médico para que le recete un antidepresivo adecuado. Las terapias complementarias para la depresión incluyen ejercicio regular, meditación, dormir mucho, fototerapia, psicoterapia o asesoramiento. Algunos suplementos dietéticos también han demostrado ser eficaces para ayudar a mantener un estado de ánimo saludable, pero consulte antes a su médico para asegurarse de que un suplemento no interactúa con su medicación.
5. Problemas de corazón
Es importante que hable con su médico sobre el sexo si tiene problemas de corazón. El estrés físico del sexo puede empeorar su estado. Es probable que deba evitar las relaciones sexuales si su enfermedad es inestable o grave o si ha sufrido un infarto o una insuficiencia cardíaca.
6. Menopausia
Aunque las mujeres de cualquier edad pueden manifestar insatisfacción sexual, parece ser más frecuente en las mujeres de mediana edad. Esto se debe a que los niveles hormonales descienden drásticamente cuando una mujer entra en la menopausia. Este descenso hormonal suele provocar una disminución de la libido y sequedad vaginal, lo que hace que las relaciones sexuales resulten desagradables. La terapia estrogénica y el lubricante personal son los tratamientos a los que se recurre para los problemas sexuales causados por la menopausia.
7. Migrañas
Las migrañas son dos veces más frecuentes en las mujeres, además de más graves. El dolor intenso de una migraña te impedirá sin duda ponerte de humor. Los analgésicos sin receta son la opción habitual de tratamiento, aunque las personas con migrañas graves pueden obtener una receta preventiva. Si has tomado la medicación pero el dolor de cabeza persiste, puede ser una buena idea mantener relaciones sexuales de todos modos, ya que el 61% de las mujeres experimentan al menos un ligero alivio del dolor de cabeza después del sexo.
8. Obesidad
La obesidad afecta a la vida sexual de muy diversas maneras. La obesidad suele ir acompañada de una mala imagen corporal, incapacidad para soportar el esfuerzo físico del sexo e incapacidad para lograr posturas sexuales. La obesidad también aumenta el riesgo de padecer otros problemas de salud, como diabetes y cardiopatías, que causan más problemas sexuales. Fuentes médicas fiables pueden ofrecerle información útil sobre cómo conseguir una pérdida de peso realista.
9. Embarazo
Algunas mujeres embarazadas experimentan un gran aumento del deseo sexual durante el embarazo. Otras experimentan fluctuaciones drásticas y otras pueden experimentar una disminución constante. No hay mucho que hacer contra la pérdida de libido relacionada con el embarazo; algunos suplementos naturales pueden ayudar, pero asegúrese de obtener primero la aprobación de su médico. Es probable que el embarazo también te obligue a buscar nuevas posturas.
10. Estrés
Cada vez se reconoce más que el estrés es un problema médico real. El estrés le perjudica psicológica y físicamente, aumentando el riesgo de depresión, ansiedad, dolor de cabeza, insomnio, aumento de peso y enfermedades cardiacas. Todas estas cosas pueden perjudicar su satisfacción sexual. Alivie el estrés de forma saludable para tener la mejor vida sexual posible. Los suplementos a base de plantas que contienen maca, lavanda o pasiflora pueden calmar los nervios y ayudar al organismo a lidiar mejor con el estrés. Otras buenas opciones para reducir el estrés son el ejercicio, la meditación, la lectura, la música, la vida social y, por supuesto, el sexo.