Los estudios confirman que, en general, una relación estable y duradera es beneficiosa para la salud. Las personas casadas pueden tener una tasa de mortalidad entre un 10% y un 15% menor que las solteras. Por lo general, las relaciones mejoran la salud mental de las mujeres y la salud física de los hombres (aunque, por supuesto, hay muchas coincidencias). Se cree que los beneficios para la salud del amor romántico se aplican principalmente a las relaciones a largo plazo, y no necesariamente a las citas a corto plazo o a las primeras fases de una relación. ¿Por qué son buenas las relaciones para la salud?
1. Un estudio sobre el dolor explica por qué la pareja puede afectar a la salud
Una investigación realizada por la Universidad de Colorado, en colaboración con la Universidad de Haifa (Israel), ha demostrado que el contacto físico con la pareja romántica actúa como analgésico natural. En concreto, el estudio se centró en las relaciones heterosexuales: cuando la pareja femenina sentía dolor, el contacto físico con su pareja masculina aliviaba el sufrimiento. La respiración y los patrones cardíacos de la pareja también empezaban a sincronizarse. Aunque este estudio individual estaba algo limitado -sólo examinó a mujeres con dolor que mantenían relaciones heterosexuales, y sólo reclutó a 22 parejas-, es más que probable que este principio se aplique tanto a hombres como a mujeres, y a los que mantienen relaciones homosexuales.
Los autores del estudio explican que esto es demostrativo de un principio más general: la sincronización interpersonal. Se trata de un fenómeno en el que la fisiología de una persona empieza a reflejar la de las personas con las que pasa mucho tiempo. Los científicos han observado que esto ocurre en todo el reino animal, así como en los seres humanos, y es parte integrante de la naturaleza profundamente social de nuestra especie. La sincronización interpersonal significa que tu pareja puede afectar a muchos aspectos diferentes de tu salud.
2. Es más fácil crear hábitos saludables si la pareja se une a ellos
La sincronización interpersonal también se produce a un nivel superior al de los procesos biológicos básicos, extendiéndose también a las elecciones y comportamientos conscientes. Por ejemplo, investigadores del University College de Londres descubrieron que es mucho más fácil desarrollar hábitos saludables si se hace un esfuerzo conjunto con la pareja. En concreto, descubrieron que las mujeres que intentaban dejar de fumar sólo tenían un ocho por ciento de éxito si su pareja seguía fumando mientras tanto. Este porcentaje aumenta hasta el 50% de éxito si la pareja de la mujer intenta dejar de fumar al mismo tiempo. Si el compañero de la mujer nunca ha fumado, ésta sólo tiene un 17% de posibilidades de dejar de fumar con éxito.
Dejar el tabaco no es probablemente el único cambio de estilo de vida que puede resultar más fácil si lo lleva a cabo junto con su pareja. Probablemente descubrirá que crear hábitos de ejercicio, comer sano y reducir el consumo de alcohol también es más fácil si su pareja hace el mismo cambio. De hecho, esto se ve respaldado por otras investigaciones, como un estudio que demostró que las personas que empiezan a hacer ejercicio con regularidad hacen que sus parejas sean más propensas a hacer lo mismo.
3. El estado civil afecta a la salud del corazón
Un análisis a gran escala de más de 3,5 millones de estadounidenses descubrió que las personas casadas, independientemente de cualquier otro factor, tienen muchas menos probabilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares. Más concretamente, estar casado en lugar de soltero reduce el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares en un 12% en los menores de 50 años, en un 7% en los que tienen entre 51 y 60 años, y en un 4% en los mayores de 60 años. Ser viudo aumenta el riesgo en un tres por ciento, y estar divorciado, en un cinco por ciento. Los autores del estudio afirman que los beneficios para la salud cardiaca de estar casado se deben probablemente a la forma en que las personas casadas tienden a cuidarse mutuamente.
Curiosamente, un estudio descubrió que las personas cuyas parejas sentimentales son muy serviciales y comprensivas tienen una menor acumulación de calcio en las arterias, que es un factor predictivo de las enfermedades cardiacas. Esto puede deberse a que tener una pareja que no ayuda ni apoya aumenta los niveles de estrés, lo que a su vez afecta al bienestar cardiovascular.
4. Los efectos de la pareja en la salud mental
El estado de tu relación -y quizás, lo que es más importante, la calidad de la misma- puede tener un profundo impacto en tu salud mental. Una buena relación puede hacerte sentir increíble y aliviar toneladas de estrés. Esto es especialmente cierto si tienes una vida sexual sana, como demuestra un estudio de 2009 que descubrió que el sexo frecuente conduce a una mayor satisfacción vital y a una mejor salud mental. Otro estudio, realizado por la Organización Mundial de la Salud en 2010, examinó los datos de unas 35.000 personas y descubrió que estar casado, independientemente de lo feliz que fuera el matrimonio, reducía el riesgo de desarrollar trastornos de ansiedad y otras afecciones mentales. Otras investigaciones han descubierto que estar casado alivia los síntomas de la depresión.
Naturalmente, si tu relación es infeliz o está llena de discusiones, tu salud mental puede resentirse debido al aumento del estrés.
5. Los inconvenientes de una relación feliz
Sin embargo, la sincronización interpersonal entre dos parejas románticas tiene sus inconvenientes. Aunque los hábitos saludables son más fáciles de formar cuando se hacen juntos, también es más fácil caer en los no saludables. Esto es especialmente cierto si se está muy contento en la relación: las investigaciones han descubierto que las personas que son más felices en su matrimonio tienen más probabilidades de engordar con el paso de los años. Es importante ser consciente de este efecto y esforzarse por seguir la tendencia contraria: construir juntos un estilo de vida saludable.