Apoyar a una pareja con depresión puede ser difícil, sobre todo si uno mismo nunca ha padecido la enfermedad. He aquí algunos consejos importantes para afrontar con eficacia esta situación, a menudo difícil.
Comprender los síntomas de una pareja con depresión
Conocer los síntomas de esta enfermedad mental puede ayudarle a evitar juicios precipitados sobre su pareja. Por ejemplo, saber que descuidar las tareas domésticas puede ser un síntoma de depresión le ayudará a evitar juzgar injustamente a su pareja por ser “vago”. Los síntomas de la depresión pueden variar mucho de una persona a otra. Cada individuo puede experimentar un grupo diferente de síntomas, un número diferente de síntomas y una gravedad diferente de los síntomas. Estos síntomas incluyen, entre otros
- sentimientos anormales de culpa o inutilidad
- cambio en los hábitos alimentarios, ya sea para adelgazar o para engordar
- dificultad para tomar decisiones e iniciar acciones
- dificultad para concentrarse y recordar
- fatiga y falta de energía
- irritabilidad
- pérdida de interés por las aficiones y actividades habituales
- pérdida de interés por el sexo, o libido baja
- descuidar la higiene personal
- descuidar responsabilidades como el trabajo, las tareas domésticas y la vida social
- sentimientos persistentes de tristeza o vacío
- pesimismo o desesperanza
- trastornos del sueño, ya sea demasiado o muy poco sueño
- síntomas somáticos como dolores de cabeza y problemas digestivos
- pensamientos de suicidio u otras autolesiones
Estos síntomas deben estar presentes en la mayoría de los días y situaciones durante al menos dos semanas para que se considere clínicamente depresión. Sin embargo, si los síntomas son más leves pero están presentes la mayor parte del tiempo durante dos años o más, es indicativo de la versión más leve pero crónica de la depresión conocida como distimia. Lo mejor es que su pareja consulte con un profesional médico o psiquiátrico cuál es el diagnóstico más adecuado, ya que éste determina el tratamiento.
¿Por qué mi pareja está deprimida?
La depresión es una enfermedad mental complicada con muchas causas y factores de riesgo posibles. Estos pueden incluir:
- Abuso físico, sexual o emocional. Los malos tratos pueden distorsionar la forma de pensar sobre uno mismo y sobre el mundo, provocando depresión aunque hayan pasado muchos años desde que se produjeron.
- Conflictos interpersonales. Las discusiones, las peleas o la pérdida de la amistad pueden afectar fácilmente al estado de ánimo y, como consecuencia, una persona sensible puede desarrollar una depresión.
- Muerte y pérdida. El duelo y la tristeza asociada a él son una respuesta natural a la pérdida, pero un acontecimiento de este tipo puede desencadenar una depresión más allá de lo normal en el duelo.
- El estrés aumenta el riesgo de desarrollar depresión.
- La genética influye en la facilidad con que una persona se deprime. Algunas personas tienen una predisposición genética a la depresión, incluso la depresión que no tiene otra causa discernible.
- Otras razones físicas, como desequilibrios hormonales o enfermedades crónicas.
Es importante no hacer suposiciones sobre por qué su pareja está deprimida, sino preguntarle qué le ocurre. Recuerde que también es normal no saber exactamente por qué está deprimido, por lo que es posible que no reciba una respuesta definitiva.
Evitar juicios e ideas equivocadas
Hay que ser consciente de los mitos y conceptos erróneos sobre la depresión para no caer presa de estas formas de pensar. Entre los malentendidos más comunes está pensar que la depresión es un signo de debilidad mental y que uno puede simplemente “salir de ella”. Si juzga a su pareja de esta manera, se sentirá incomprendida, lo que puede hacer que se sienta más sola. Si su pareja se siente así, puede deprimirse más o tardar más en recuperarse.
Ser una persona segura con la que hablar
El apoyo emocional e interpersonal es una de las formas más eficaces de ayudar a una pareja con depresión. Si se asegura de que su pareja le ve como una persona segura a la que acudir con sus problemas, se sentirá cómoda abriéndose y pidiendo lo que necesita. Evitar juzgar es la piedra angular para ser una fuente segura de apoyo, pero hay más. También hay que mostrar receptividad hacia la pareja deprimida. Escuche con paciencia y no rechace a su pareja cuando quiera hablar de sus problemas.
Ayudar a aliviar su estrés diario
El estrés suele ser una de las características distintivas de la depresión, y repercute en la salud general de muchas otras formas negativas. Esta enfermedad está causada por el estrés, empeora con el estrés y crea más estrés. Ayudar a reducir el estrés diario de su pareja le da menos de qué preocuparse y es una forma de mostrar el apoyo emocional que su pareja con depresión necesita. Una buena forma de ayudar a aliviar el estrés de su pareja es hacerle tareas y recados que normalmente haría ella misma.
Ayudarles a obtener la ayuda que necesitan
Una forma muy sencilla de ayudar a la pareja con depresión es preguntarle qué necesita y ofrecérselo. Esto puede ser algo como hacer un recado para ellos, pasar tiempo con ellos, prestar su oído o cocinar la cena para ellos. Sin embargo, como pareja no se puede hacer mucho por una persona con depresión, sobre todo cuanto más grave es la enfermedad. Apoye a su pareja para que busque medicación o terapia de conversación si lo necesita.
Ser paciente con la propia pareja
Recuerde que la depresión puede ser resistente al tratamiento y que, aunque finalmente se resuelva la enfermedad, puede haber mucho ensayo y error a la hora de encontrar tratamientos eficaces, especialmente en lo que se refiere a los medicamentos. Sea paciente y siga apoyando a su pareja con depresión durante todo el tratamiento.