Comer sano tiene muchos beneficios, pero investigaciones recientes han relacionado la dieta y la salud de la piel, indicando que los alimentos que ingerimos afectan a nuestra piel.
Las prácticas dietéticas pueden influir en el estado de la piel
Las dietas de choque, también conocidas como dietas de moda, son más perjudiciales que beneficiosas por varias razones. En primer lugar, representan soluciones temporales a un problema a largo plazo. Aunque se pierda el peso prometido siguiendo la dieta, lo más probable es que se recuperen esos kilos en cuanto se abandone la dieta. ¿Cómo afecta esto a la piel? Al perder peso, la piel queda flácida. Cuando vuelvas a ganar peso, la piel volverá a dilatarse y aparecerán arrugas y estrías.
Una alternativa mejor para promover un estado más saludable y una piel mejor es adoptar cambios permanentes en el estilo de vida. Es importante adoptar un estilo de vida más saludable, que incluya una dieta centrada en proteínas saludables como el pollo, el pescado y las legumbres, y una variedad de frutas y verduras frescas. Esto contribuirá a la pérdida de peso y beneficiará el metabolismo, por lo que será más fácil mantener esos kilos a raya.
A algunas personas les preocupa no comer lo suficiente cuando modifican así sus hábitos alimentarios. Sin embargo, los nutricionistas recomiendan comer al menos cinco raciones de fruta y verdura al día para obtener el máximo de beneficios. Además de grandes aportes de vitaminas y minerales, los alimentos vegetales son también excelentes fuentes de antioxidantes. Una de las funciones más importantes de los antioxidantes es que combaten los radicales libres del organismo, responsables de la aparición de arrugas, manchas de la edad y otras imperfecciones de la piel.
Algunos alimentos para mejorar la dieta y la salud de la piel
He aquí algunos alimentos saludables para el organismo que pueden ayudar a mejorar el estado de la piel. Aunque no son los únicos alimentos naturales que pueden beneficiar a la piel, constituyen un buen punto de partida y demuestran que existe una gran variedad entre la que elegir.
Pescado graso
Aunque muchos alimentos grasos pueden tener un impacto negativo en la salud de la piel, el pescado graso tiene el efecto contrario. Las sardinas, el arenque y el salmón son algunos de los pescados de agua fría ricos en ácidos grasos omega-3, de los que se han descubierto numerosos beneficios para la salud humana. Para la piel, puede reducir significativamente las posibilidades de desarrollar cánceres de piel no melanoma. La radiación ultravioleta (UV) provoca daños en las células de la piel, además de contribuir a la inflamación y la inmunosupresión, pero los ácidos grasos omega-3 ayudan a anular ese efecto en la piel.
Nueces
Al igual que el pescado de agua fría, las nueces también son ricas en ácidos grasos omega-3, pero también contienen altos niveles de ácidos grasos insaturados omega-6. Estos ácidos actúan reduciendo tipos específicos de inflamación, incluida la que causa afecciones cutáneas como el eczema y la psoriasis. Estos ácidos actúan reduciendo determinados tipos de inflamación, incluida la que causa afecciones cutáneas como el eccema y la psoriasis. Se calcula que casi el 99% de los estadounidenses carecen de suficientes ácidos grasos en su dieta.
Almendras
Estos frutos secos también tienen un alto contenido en ácidos grasos esenciales. Además, aportan altas concentraciones de vitamina E, un nutriente esencial para una piel sana. También contienen antioxidantes, que ayudan a reducir la inflamación de las células cutáneas.
Semillas de lino
Las semillas de lino tienen un alto contenido en un tipo específico de ácido graso omega-3, conocido como ácido alfa-linolénico (ALA). Este compuesto puede ayudar a mantener una piel sana. En un estudio, los investigadores administraron a mujeres con piel sensible dosis regulares de aceite de linaza durante un periodo de tres meses. Al final del estudio, las mujeres experimentaron menos aspereza y descamación de la piel, menos sensibilidad cutánea, mejor hidratación y una piel más suave.
Aguacate
Este alimento natural ayuda a la piel de varias maneras. Al ser una gran fuente de grasas saludables y vitamina E, protege y nutre la piel. Las grasas que contiene el aguacate son necesarias para el organismo, pero no se producen de forma natural en cantidades suficientes, por lo que es necesario consumir alimentos ricos en grasas saludables. Además, los aguacates contienen luteína y zeaxantina, compuestos que ayudan al organismo a combatir los efectos visibles de los daños causados por los rayos UV.
Alimentos divertidos para una piel más sana
Para mejorar la alimentación y la salud de la piel, proponemos algunos consejos. Aquí hay más formas divertidas de comer sano y proteger la piel.
Vino tinto
Cuando se produce vino tinto, se le añade resveratrol, un compuesto natural que se encuentra en la piel de la uva. Aunque el resveratrol aporta numerosos beneficios para la salud, se ha hecho muy popular por su capacidad para reducir los efectos del proceso de envejecimiento. Además, el vino tinto contiene los antioxidantes necesarios para combatir los radicales libres y, de ese modo, se inhibe el proceso de envejecimiento y se reduce el daño celular de la piel.
Chocolate negro
Ya sabemos que el chocolate negro contiene antioxidantes, que atacan los radicales libres del organismo. Según un estudio, el consumo regular de cacao en polvo durante tres meses benefició a los sujetos de la prueba, ya que les ayudó a desarrollar una piel más gruesa e hidratada. Los investigadores también descubrieron que los sujetos de prueba eran menos propensos a sufrir quemaduras solares porque tenían un mejor flujo sanguíneo.
Batatas
Este alimento delicioso y natural es una fuente importante de betacaroteno, que actúa como protector solar natural. El consumo de alimentos ricos en betacaroteno reduce el riesgo de quemaduras solares y de algunos tipos de cáncer de piel. Este nutriente también puede proteger la piel de las arrugas y las manchas solares.
Al consumir una amplia gama de alimentos naturales, se pueden aumentar los niveles de vitaminas y antioxidantes en el organismo. Para asegurarse de que el organismo ingiere las vitaminas, minerales y nutrientes necesarios, también puede considerar la posibilidad de complementar la dieta con una fórmula natural de alta calidad. En resumen, la práctica de buenos hábitos alimentarios puede beneficiar a nuestro cuerpo tanto por fuera como por dentro.