Con la edad, disminuyen diversas funciones corporales. En los hombres, los cambios en la próstata pueden hacerse evidentes con la edad avanzada. De hecho, el cáncer de próstata es una enfermedad frecuente en los hombres a medida que envejecen. Los estudios sugieren que el número de parejas sexuales puede aumentar el riesgo de cáncer de próstata.
¿Qué es la próstata?
La próstata es una pequeña glándula del aparato reproductor situada entre la vejiga y el pene del hombre. La función principal de la próstata es producir el líquido que permite al hombre eyacular esperma durante el coito. Con la edad, esta glándula puede infectarse o agrandarse. Cualquiera de estas afecciones puede precipitar varios problemas urinarios o de la función sexual. La enfermedad prostática potencial más grave es el cáncer.
Cáncer de próstata
Los tumores malignos de próstata se consideran uno de los cánceres más frecuentes entre los hombres. Las estadísticas recopiladas por la Sociedad Americana del Cáncer afirman que el cáncer de próstata afectará a uno de cada nueve hombres a lo largo de su vida. Podría decirse que el mayor factor de riesgo es la edad. Aproximadamente el 60% de todos los casos se diagnostican en hombres mayores de 65 años. La enfermedad es poco común en hombres menores de 40 años y se da con más frecuencia en hombres afroamericanos que en los de otras razas y etnias.
El número de parejas sexuales influye en el riesgo de cáncer de próstata
Un estudio realizado por el Cancer Council New South Wales estudió recientemente a 10.000 hombres e investigó su riesgo de padecer cáncer de próstata. Los investigadores descubrieron que un mayor número de parejas sexuales era un factor de riesgo significativo. Además, el equipo de examinadores australianos también llegó a la conclusión de que otros comportamientos sexuales contribuían a aumentar las probabilidades de desarrollar esta dolencia potencialmente mortal, como mantener la primera relación sexual antes de cumplir los 17 años y tener más de cinco orgasmos en el mes anterior al diagnóstico de cáncer. Además, los hombres que alcanzaron pronto la pubertad fueron diagnosticados de cáncer de próstata en mayor medida que los que no lo hicieron.
Los investigadores afirmaron además que los hábitos sexuales mencionados, en combinación con otros factores de riesgo más comunes, como que un familiar hombre haya sido diagnosticado de cáncer de próstata (como su padre) o haber padecido anteriormente algún tipo de enfermedad prostática benigna, podrían duplicar las probabilidades de desarrollar cáncer.
El sexo monógamo podría reducir el riesgo
Sin embargo, algunos profesionales de la medicina creen que mantener más relaciones sexuales puede ayudar al hombre a reducir las probabilidades de desarrollar cáncer de próstata. Dicho esto, el problema es que el aumento de las relaciones sexuales debe producirse con una pareja monógama. Algunos urólogos (médicos especializados en las vías reproductivas y urinarias del cuerpo) creen que la inflamación podría ser un factor precipitante en la génesis del cáncer de próstata, y que eyacular a menudo ayuda a los hombres a evitar que la próstata y otros órganos sexuales acumulen un nivel peligroso de irritación.
Los defensores de ambos argumentos advierten de que ninguna de las dos opciones de estilo de vida es un predictor infalible de un posible diagnóstico de cáncer de próstata. Sin embargo, creen que esta información debería dar que pensar a los hombres y que cada hipótesis merece un estudio más profundo en el futuro.
Métodos naturales para preservar la salud de la próstata
Independientemente de los hábitos sexuales de un hombre, podría lograr el objetivo de preservar la salud y vitalidad de su próstata ejecutando algunas de estas prácticas naturales:
Seguir una dieta sana
Además de consumir alimentos ricos en vitaminas y minerales y evitar productos que contengan niveles excesivos de sustancias potencialmente perjudiciales para la salud, como grasas, sal y azúcar, los médicos y nutricionistas opinan que el consumo de verduras de hoja verde es fundamental para la salud de la próstata. Estos alimentos no sólo contienen altos niveles de vitaminas y minerales importantes, sino que también están repletos de antioxidantes. Los antioxidantes son potentes sustancias que combaten la inflamación corporal y se sabe que mantienen a raya la inflamación prostática.
Someterse a exámenes médicos específicos
Los médicos sugieren que todos los hombres, especialmente los mayores de 40 años, que tengan antecedentes familiares de problemas de próstata o experimenten cualquier dificultad sexual o urinaria se sometan a un chequeo exhaustivo. Cuanto antes se diagnostique cualquier problema, más fácil será tratarlo.
Mantenerse hidratado
El consumo adecuado de agua es crucial para la salud y el funcionamiento de todo el aparato reproductor y urinario, en particular de la próstata.
Balancear los niveles hormonales
Los desequilibrios hormonales pueden afectar a muchos sistemas corporales, sobre todo al aparato reproductor y sexual. Además, algunos profesionales médicos afirman que los desequilibrios hormonales podrían contribuir al desarrollo del cáncer de próstata.
Evitar los vicios insanos
Como ocurre con muchos otros órganos y sistemas corporales, la próstata puede verse afectada negativamente por hábitos nocivos como fumar, beber alcohol en exceso y consumir ciertas drogas.
Tomar suplementos naturales
Complementar la dieta con suplementos naturales específicos puede mejorar la función de la próstata. Sustancias como el zinc y la palma enana americana poseen importantes propiedades de equilibrio hormonal y antiinflamatorias.