El selenio es un elemento químico no metálico que el cuerpo humano necesita en cantidades muy pequeñas. En todo momento hay entre 13 y 20 miligramos de este mineral presentes en el organismo. El selenio interviene en la salud inmunitaria, la salud reproductiva, la síntesis del ADN y las hormonas tiroideas, entre otras. Las fuentes alimentarias de selenio más destacadas son las nueces de Brasil, las setas y las vísceras. También está presente en menores cantidades en otros productos animales y en los cereales. Sin embargo, el contenido de selenio de los alimentos puede variar mucho en función de su origen geográfico, ya que algunos suelos tienen un mayor contenido de selenio que otros.
Es importante consumir suficiente selenio. Los adultos mayores de 14 años deben tomar 55 microgramos al día. Las mujeres embarazadas deben ingerir 60 microgramos de selenio al día, y las lactantes, 70. Tomar un suplemento dietético que contenga este nutriente puede ser beneficioso para la salud, especialmente si se corre el riesgo de tener un nivel bajo de selenio. Es posible correr el riesgo de tener un nivel bajo de selenio en caso de someterse a una hemodiálisis prolongada, fumar cigarrillos, beber alcohol, tomar píldoras anticonceptivas o padecer una enfermedad que provoque una mala absorción (como la enfermedad de Crohn, la celiaquía, la colitis ulcerosa o el VIH). Nuevas investigaciones indican que existe una relación directa entre la carencia de selenio y el cáncer de hígado.
La relación entre la carencia de selenio y el cáncer de hígado
Uno de los beneficios del selenio para la salud descubiertos más recientemente es que una cantidad suficiente en el organismo puede ayudar a proteger contra el cáncer de hígado. Estudios anteriores ya han demostrado las propiedades antioxidantes del selenio, que se amplifican cuando el selenio se combina con la vitamina E. Poseer propiedades antioxidantes significa que este nutriente ayuda a proteger contra el daño celular causado por moléculas sin carga conocidas como radicales libres, que es un tipo de daño celular bien asociado con el desarrollo del cáncer.
Un nuevo estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition sugiere que existe una relación entre la carencia de selenio y el riesgo de cáncer de hígado. Estos hallazgos también se extendieron a otros cánceres del tracto biliar, incluidos los de páncreas, vesícula biliar y conductos biliares. Según la Sociedad Americana del Cáncer, más de 21.000 estadounidenses mueren cada año a causa de estos cánceres.
En el estudio, los investigadores analizaron los datos de unos 477.000 adultos durante un periodo de una década. Más de 260 de estas personas desarrollaron cáncer de hígado y otros cánceres del tracto biliar durante este periodo de tiempo. Se descubrió que las personas que desarrollaron estos tipos de cáncer tenían niveles de selenio significativamente más bajos que el resto. En comparación con los que tenían los niveles más altos de selenio, las personas del estudio con los niveles más bajos tenían hasta 10 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de hígado.
Otros beneficios del selenio para la salud
Tener niveles bajos de selenio no sólo aumenta el riesgo de cáncer de hígado, sino también el riesgo de muerte por cualquier tipo de cáncer. Los científicos también han observado que las regiones geográficas ricas en selenio tienen tasas de cáncer más bajas por término medio. Todavía no se ha investigado mucho sobre cánceres específicos en relación con la ingesta de selenio. Un estudio realizado en los Países Bajos descubrió que los hombres con niveles más altos de selenio tienen un menor riesgo de padecer cáncer de próstata. Dos estudios realizados hasta la fecha también sugieren que consumir mucho selenio puede ayudar a proteger contra el cáncer colorrectal.
Además de la relación entre la carencia de selenio y el cáncer de hígado, consumir suficiente selenio tiene muchos otros beneficios para la salud. El selenio es necesario para una salud reproductiva óptima, ya que contribuye a la movilidad de los espermatozoides. Si un hombre no consume suficiente selenio, puede sufrir infertilidad. El selenio también es importante para la salud reproductiva de la mujer. Se han realizado estudios que demuestran que unos niveles bajos de selenio pueden disminuir la fertilidad femenina, afectar al crecimiento del feto y, posiblemente, provocar un aborto espontáneo.
Otro de los beneficios más notables del selenio para la salud son sus beneficios para la salud cardiovascular. Los niveles bajos de selenio son comunes entre los pacientes con infarto de miocardio, y una deficiencia grave de selenio puede causar insuficiencia cardíaca. Otro beneficio que tiene el selenio para la salud del corazón es que, combinado con la vitamina E y el betacaroteno, puede ayudar a normalizar los niveles de colesterol.
El selenio también es necesario para la glándula tiroides. Este elemento está presente en las enzimas que activan y desactivan las distintas hormonas tiroideas. Por lo tanto, obtener una cantidad suficiente de este nutriente es importante para el correcto funcionamiento de la tiroides. Los estudios han demostrado que tomar un suplemento de selenio reduce la inflamación en las personas con tiroiditis autoinmune, así como en la tiroiditis de Hashimoto.
Por último, los estudios han descubierto que los niveles de selenio disminuyen con la edad. Un nivel bajo de selenio puede contribuir al deterioro cognitivo de las personas mayores, como demostró un estudio considerablemente amplio que analizó a casi 1.400 personas durante un periodo de nueve años. Se cree que este efecto se debe a que el selenio reduce el estrés oxidativo (daño celular causado por los radicales libres), un factor que contribuye al deterioro cognitivo.