Investigadores descubren un vínculo entre la vitamina D y el síndrome metabólico

Una nueva investigación sobre la relación entre la vitamina D y el síndrome metabólico sugiere que la carencia de este nutriente puede ser un factor en el aumento de las tasas de enfermedades crónicas.

¿Tiene poca energía, malestar y falta de motivación? Al igual que muchos estadounidenses, ¿tiene dificultades para mantener niveles saludables de azúcar en sangre, presión arterial o colesterol? Si es así, la relación entre la vitamina D y el síndrome metabólico puede ofrecerle esperanza y una forma de superar sus dificultades. Ahora que el invierno se cierne sobre muchos de nosotros, la vitamina D se ha convertido en un importante tema de conversación y en una fuente muy común de carencia de nutrientes. ¿Ha almacenado suficiente cantidad de este nutriente vital para pasar el invierno con una salud óptima?

La fuerza del sol

Researchers Discover Link Between Vitamin D and Metabolic SyndromeLa vitamina D es esencial para la salud de huesos y dientes, así como para diversas actividades metabólicas. Si se padece una carencia grave, se corre el riesgo de desarrollar raquitismo, una enfermedad en la que las personas tienen huesos blandos que se doblan bajo su peso. Sin embargo, incluso las carencias leves de vitamina D pueden repercutir en la vida y la salud. Las personas con carencias de este nutriente vital pueden sufrir fatiga, depresión y lentitud mental. También son más propensas a padecer síndrome metabólico, un trastorno caracterizado por hiperglucemia, hipertensión arterial, hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia y acumulación de grasa alrededor de la cintura.

La razón de que tanta gente en EE.UU. y el norte de Europa tenga carencias de vitamina D no es la escasez de alimentos nutritivos, sino la falta de sol. Los precursores de la vitamina D se encuentran en algunos alimentos como el pescado graso y los huevos, así como en los cereales enriquecidos, a los que se añade. A continuación, se transforma en una forma utilizable en una serie de pasos en los que intervienen el hígado y los riñones. Además, las células de nuestra piel pueden sintetizar esta vitamina cuando se exponen a la luz solar. Los habitantes de las zonas más septentrionales pasan la mitad del año expuestos a una luz solar que no es lo suficientemente intensa como para alimentar esta reacción química; además, muchos de nosotros utilizamos protección solar en los meses más cálidos para prevenir el cáncer de piel. El resultado es que las deficiencias de vitamina D y los problemas de salud asociados son cada vez más frecuentes en el mundo occidental.

La vitamina D y el síndrome metabólico

Varios importantes estudios recientes han reforzado los vínculos ya conocidos entre la falta de vitamina D y el síndrome metabólico. Las personas mayores que tienen niveles bajos de este nutriente son más propensas a desarrollar este trastorno. En general, las personas mayores con niveles elevados de vitamina D tienen niveles más bajos de azúcar en sangre, presión arterial y colesterol, independientemente de que padezcan o no síndrome metabólico. Además, los diabéticos que tienen deficiencias de vitamina D son más propensos a tener el azúcar en sangre fuera de control, lo que les pone en riesgo de desarrollar complicaciones graves como daños en los ojos y los riñones.

Está claro que la vitamina D es importante para prevenir el síndrome metabólico. Sin embargo, una vez que a las personas se les ha diagnosticado este trastorno, obtener suficiente vitamina D se vuelve aún más importante. Un estudio reciente ha indicado que los niveles bajos de vitamina D son necesarios para que el síndrome metabólico evolucione hacia las graves enfermedades asociadas a él, como la diabetes y las cardiopatías. Prevenir estas complicaciones es el principal objetivo del tratamiento del síndrome metabólico, por lo que obtener suficiente vitamina D puede ser crucial para la salud de los millones de estadounidenses que padecen este trastorno.

Aumentar el nivel de vitamina D

Researchers Discover Link Between Vitamin D and Metabolic Syndrome 1Si se sospecha que se tiene un nivel bajo de vitamina D, existen análisis de sangre sencillos para medir los niveles de este nutriente que cualquier médico puede recetarle. Sin embargo, cada persona necesita unos niveles distintos para funcionar de forma óptima, por lo que un resultado normal no significa automáticamente que no corra ningún riesgo. Es importante exponerse al sol todos los días sin protección solar; incluso poco tiempo en verano puede suponer una gran diferencia. No exponerse demasiado para no broncearse ni quemarse, lo que aumentaría el riesgo de cáncer de piel y envejecimiento prematuro.

Si se vive en una zona en la que la luz solar es escasa o la nubosidad es frecuente, se puede considerar la posibilidad de añadir a la dieta más cereales enriquecidos, pescado azul y huevos. También se puede tomar un suplemento de vitamina D o un complejo multivitamínico completo que la contenga. Hay varias formas de vitamina D, siendo la D3 (colecalciferol) la más potente, por lo que es importante consumir el tipo adecuado. Además, siempre es bueno para la salud comer menos azúcar y grasas saturadas, lo que reduce el riesgo de síndrome metabólico en general.

Aunque nos han enseñado a temer los rayos del sol, unos minutos de su potente luz pueden suponer una gran diferencia en nuestra salud. Unos niveles más altos de vitamina D no sólo harán que nos sintamos más enérgicos y motivados, sino que también ayudarán a prevenir algunas de las enfermedades crónicas más graves a las que se enfrentan los occidentales.

Deja un comentario