Aunque los científicos saben que las mujeres pueden presentar enfermedades cardíacas de forma diferente a los hombres, un creciente número de investigaciones indica que el riesgo de enfermedad cardíaca en las mujeres debe examinarse y tratarse de forma diferente al riesgo que presentan los hombres. En concreto, los últimos descubrimientos demuestran que las opciones de tratamiento de la hipertensión arterial pueden tener que comenzar en una fase más temprana para las mujeres en comparación con los hombres. Comprender los riesgos y los síntomas de las enfermedades del corazón y lo que se puede hacer para mantener una salud cardíaca óptima es clave para vivir una vida larga y saludable.
El ABC de las enfermedades cardíacas
Enfermedad cardíaca es un término general que se utiliza para describir una variedad de afecciones cardíacas. Aunque el tipo más común de enfermedad cardíaca es la enfermedad de las arterias coronarias (EAC), hay una serie de afecciones adicionales que se engloban bajo este paraguas. Si no se diagnostican o no se tratan, las cardiopatías pueden provocar un ataque cardíaco mortal, una insuficiencia cardíaca o una arritmia.
Los principales factores de riesgo de las cardiopatías son el tabaquismo, la hipertensión arterial y el colesterol alto. Otros factores de riesgo que pueden aumentar las probabilidades de padecer una cardiopatía son la diabetes, una dieta poco saludable, la obesidad, el consumo excesivo de alcohol y la falta de actividad física. Se puede reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardíaca si se intenta reducir los factores de riesgo.
También es posible tener bajo control la salud del corazón conociendo los síntomas de las enfermedades cardíacas. A muchas personas no se les diagnostica una cardiopatía hasta que sufren un incidente agudo, como un infarto o un ictus. Por ello, las enfermedades del corazón se conocen como el asesino silencioso. Controlar la presión arterial es una de las mejores maneras de diagnosticar posibles problemas cardíacos.
Otros signos a los que hay que prestar atención son la angina de pecho, la falta de aire durante una actividad moderada y el dolor en la espalda, la parte superior del abdomen, el cuello y la zona de la mandíbula.
Riesgo de enfermedad cardíaca en las mujeres
Es importante entender que las enfermedades del corazón en las mujeres suelen presentar síntomas diferentes a los de sus homólogos masculinos. Por ejemplo, es más probable que las mujeres presenten síntomas atípicos que no suelen observarse en los hombres. Algunos de estos síntomas menos evidentes son los vómitos, las náuseas y la fatiga.
Una de las razones por las que las mujeres pueden experimentar las enfermedades del corazón de forma diferente a los hombres es por la presencia de la hormona estrógeno. La disminución de estrógenos que se produce cuando las mujeres tienen la menopausia aumenta el riesgo de endurecimiento de las arterias. Por ello, las mujeres son más propensas a sufrir hipertensión después de los 60 años, cuando han completado el proceso de la menopausia. Esto contrasta con los hombres, que suelen padecer hipertensión a edades mucho más tempranas.
Además, las mujeres tienen más probabilidades de experimentar niveles de ingresos más bajos, desempleo y otros factores socioeconómicos y de estilo de vida que aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardíacas.
Nuevos datos de investigación
Un nuevo estudio dirigido por científicos de Noruega ha arrojado más luz sobre las diferencias entre hombres y mujeres en lo que respecta a los síntomas de las enfermedades cardíacas. El estudio demostró que las mujeres de 40 años a las que se les diagnostica una hipertensión leve pueden acabar teniendo el doble de probabilidades que las mujeres con lecturas normales de presión arterial de sufrir un ataque al corazón o una angina inestable cuando llegan a los 50 años.
Aunque los hombres son más proclives que las mujeres a ser diagnosticados de hipertensión a principios de los 40 años, el daño duradero parece producirse con lecturas de presión arterial más bajas en el caso de las mujeres. Si se confirman los resultados de este estudio, los datos podrían indicar que las mujeres deberían comenzar el tratamiento de la hipertensión con lecturas de presión arterial más bajas debido al daño a largo plazo que puede causar.
Mantener la salud del corazón de forma natural
Aunque las enfermedades del corazón son ciertamente algo que debe preocupar, la buena noticia es que hay una serie de cosas que pueden hacerse ahora para mantener proactivamente una salud cardíaca óptima.
Cuidado con lo que se come
Lo que se mete en la boca puede tener un efecto perjudicial en la capacidad de mantener la presión arterial bajo control. Es importante consumir abundantes verduras, frutas, mariscos y cereales integrales saludables para el corazón. Para empezar el día de la mejor manera posible, hay que hacer del desayuno una comida sana y completa.
Mantener el cuerpo en movimiento
Dado que se ha demostrado que la falta de actividad física aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, es importante que el ejercicio regular forme parte de la rutina diaria. La actividad física también permitirá mantener un peso bajo, lo que reducirá aún más el riesgo de padecer enfermedades cardíacas.
Descanso
La respiración lenta, profunda y deliberada hace milagros para mantener bajas las lecturas de la presión arterial. Ser conscientes de nuestra salud mental y emocional nos reportará grandes beneficios para la salud del corazón.
Comprender las diferencias de género tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de las enfermedades cardíacas puede servir para tomar mejores decisiones para la salud.