El estrés afecta al cerebro de múltiples maneras. Reduce la capacidad de recordar y el aprendizaje perceptivo, además de dañar la estructura cerebral.
El estrés: El mayor peligro para la salud de nuestro tiempo
Con el ajetreado estilo de vida actual, el estrés puede atacarnos por todas partes. Las preocupaciones económicas, la presión en el trabajo, los problemas de salud, los problemas familiares, las relaciones tensas y el simple hecho de estar demasiado ocupados pueden suponer una pesada carga sobre nuestros hombros. La experiencia del estrés no sólo resulta desagradable, sino que además tiene muchos efectos negativos. El estrés libera la hormona cortisol, que ayuda a rendir bien en una situación de vida o muerte, pero sólo causa más problemas si la situación que causa el estrés no es tan grave. Se sabe que los altos niveles de cortisol asociados al estrés crónico, además de sus numerosos efectos fisiológicos negativos, aumentan el riesgo de padecer diversas enfermedades mentales y físicas. Entre ellas se incluyen:
- Enfermedad de Alzheimer
- Ansiedad
- Asma
- Depresión
- Diabetes
- Problemas gastrointestinales
- Dolor de cabeza
- Cardiopatías
- Obesidad
Aunque algunos de estos problemas de salud son bastante evidentes, el estrés también afecta al cerebro de forma más sutil de lo que la mayoría de la gente cree.
El estrés afecta a la memoria
Un aspecto positivo de la hormona cortisol es que puede aumentar la capacidad del cerebro para crear nuevos recuerdos. Desgraciadamente, cuando se trata de rememorar esos mismos recuerdos, el cortisol dificulta la capacidad de recordar. Un estudio en el que participaron más de 1.200 voluntarios descubrió que las personas cuyos niveles de cortisol aumentan más cuando intentan recordar algo tienen más dificultades para recordar que las personas cuyos niveles de cortisol no aumentan tanto.
No es sólo la habilidad de recordar hechos la que se ve comprometida ante el estrés, sino también la de recordar cómo hacer las cosas, como demuestra un estudio que descubrió que someterse a una situación estresante de antemano reducía significativamente la capacidad de los participantes para encontrar objetos en un laberinto.
Se cree que los efectos reductores de la memoria del cortisol se deben a la forma en que la hormona se une a los receptores del hipocampo y la amígdala, dos de las regiones cerebrales más importantes en lo que se refiere a la memoria. Cuanto más tiempo se experimente estrés crónico, más se verá afectada la memoria. El estrés podría aumentar el riesgo de pérdida de memoria relacionada con la edad. Mantenga su mente despierta reduciendo y aliviando el estrés en su vida.
El estrés reduce la capacidad de percepción
Existen varios tipos de memoria y de aprendizaje. Un tipo es el aprendizaje perceptivo, que es esencialmente la capacidad de aprender a percibir las cosas con mayor precisión. Sí, esta es otra de las habilidades del cerebro que se ven comprometidas por el estrés crónico.
En un estudio, los investigadores hicieron que los participantes se sometieran a un sencillo entrenamiento de percepción táctil que les proporcionaría un mejor sentido del tacto. Sin embargo, los investigadores también hicieron que algunos de los participantes recibieran una dosis de cortisol, mientras que el resto recibió un fármaco placebo. Los resultados del estudio determinaron que el cortisol reducía la capacidad de los voluntarios para entrenar sus sentidos.
Entrenar los sentidos tiene muchas aplicaciones prácticas. Por ejemplo, no podrías convertirte en un maestro de la pintura o la música sin la capacidad de aprendizaje perceptivo. Reducir el estrés puede facilitar el aprendizaje de nuevas habilidades perceptivas.
El estrés afecta a la estructura del cerebro
El estrés crónico remodelará literalmente el cerebro. Investigadores de la Universidad de California en Berkeley han descubierto que el estrés crónico afecta a la forma en que se diferencian las células madre del cerebro. Cuando se sufre demasiado estrés, se reduce la proporción de células nuevas nacidas en el cerebro que maduran y se convierten en neuronas. Además, aumenta la proporción de células productoras de mielina (una capa grasa aislante que rodea las células nerviosas).
Cuando hay demasiada mielina y pocas neuronas, la comunicación dentro del cerebro es menos ágil y eficaz. Además, el exceso de mielina en el cerebro refuerza la conexión entre la amígdala y el hipocampo. Este aumento de la conexión tiene el desafortunado efecto de poner al cerebro en perpetuo modo de lucha o huida. Esto ayuda a explicar por qué el estrés crónico puede aumentar el riesgo de ansiedad y otras afecciones.
La forma física en que el estrés afecta al cerebro también provoca una reducción de la plasticidad cerebral, que es esencialmente la capacidad de recuperación y aprendizaje del cerebro.
Aliviar el estrés
Mantén el cuerpo y el cerebro lo más sanos posible afrontando el estrés de forma saludable. Por supuesto, el primer paso es intentar eliminar todas las fuentes de estrés de su vida. Sin embargo, hay cosas que no podemos cambiar tan fácilmente. Hay algunas fuentes de estrés con las que simplemente tenemos que lidiar. Puedes aliviar el estrés y prevenir todas estas formas negativas en que el estrés afecta al cerebro con las siguientes medidas de estilo de vida:
- Mantenerse conectado socialmente. Cultivar amistades estrechas.
- Realizar al menos 150 minutos de ejercicio moderado a la semana.
- Dormir al menos siete horas cada noche.
- Adoptar la meditación consciente como rutina diaria para aliviar el estrés.
- Evitar el consumo de cafeína, que aumenta los niveles de cortisol.
- Tomar un suplemento que contenga hierbas adaptógenas, que mejoran la resistencia del organismo frente al estrés. Algunos ejemplos son el Panax ginseng, el eleutero, la raíz de maca y la pasiflora.
- Mantener un buen sentido del humor sobre la vida. Ríase a menudo.
Puede que no seamos capaces de eliminar el estrés por completo, pero con unos sencillos cambios en nuestro estilo de vida, es posible disminuir la carga que el estrés supone para nuestro cerebro y nuestro cuerpo, facilitando una mejor salud.