El ayuno, sobre todo el intermitente, es una de las tendencias más destacadas en pérdida de peso y forma física. Pero a diferencia de otras dietas de moda, ésta parece haber llegado para quedarse. Varios estudios recientes han descubierto que el ayuno intermitente puede tener efectos positivos para la salud, incluso al margen de los beneficios para el peso. Un estudio reciente sobre los efectos antienvejecimiento del ayuno sugiere que incluso puede ralentizar el proceso bioquímico del envejecimiento.
¿Qué es el ayuno intermitente?
Los seres humanos han ayunado durante milenios, principalmente por motivos religiosos o espirituales. Sin embargo, en los tiempos modernos, muchas personas se están dando cuenta de que ciertos tipos de ayuno pueden tener beneficios espectaculares para la salud. El ayuno intermitente es uno de ellos. En este tipo de ayuno, las personas pasan un periodo de tiempo específico sin ingerir alimentos ni calorías, seguido de un periodo de tiempo durante el cual pueden comer. Los bloques de tiempo más comunes son el 16:8, en el que el periodo de ayuno dura 16 horas y se permite comer durante un intervalo de ocho horas cada día. Sin embargo, otras dietas populares pueden incorporar periodos de ayuno ligeramente más cortos.
Aunque mantener este tipo de horario de comidas puede parecer difícil, a la mayoría de la gente le resulta bastante fácil una vez que se acostumbra. Si lo pensamos bien, ya ayunamos durante unas ocho horas mientras dormimos. Una persona que utilice el método 16:8, por ejemplo, podría retrasar el desayuno hasta el mediodía y hacer su última comida antes de las 20.00 horas.
Cada vez son más las personas que recurren al ayuno intermitente por sus beneficios metabólicos. Los estudios han descubierto que comer de esta manera puede aumentar la pérdida de peso, mejorar el metabolismo y ayudar a conseguir un físico más delgado y tonificado. Sin embargo, la investigación ha descubierto que los beneficios del ayuno parecen extenderse mucho más allá de lo superficial.
Efectos metabólicos y antienvejecimiento del ayuno
Aunque el ayuno suele considerarse una decisión tomada por motivos religiosos o para perder peso, existen otras razones para considerar este estilo de vida. Según investigaciones recientes, las personas que ayunan no sólo disfrutan de un metabolismo más rápido, sino también de una mayor actividad antioxidante en todo el organismo. El ayuno puede incluso ralentizar los efectos del envejecimiento, tanto los signos visibles como los cambios profundos en nuestras células.
En un estudio reciente, los investigadores recogieron muestras de sangre de personas sanas que ayunaban y de personas sanas que comían normalmente. Las personas que ayunaban tenían niveles más altos de ciertos aminoácidos y metabolitos que se sabe que disminuyen con la edad. Estos metabolitos se consideran un marcador del envejecimiento celular, ya que disminuyen gradualmente de forma natural a medida que envejecemos. El hecho de que las personas que ayunaban tuvieran niveles más altos sugiere que sus células no estaban envejeciendo tan rápidamente como es normal.
En segundo lugar, las personas que ayunaban tenían niveles más altos de antioxidantes. Los antioxidantes son cruciales para prevenir no sólo el envejecimiento, sino una amplia variedad de enfermedades, desde el cáncer hasta las cardiopatías. Ayudan a eliminar las moléculas de oxígeno dañinas de nuestras células y a reparar los daños en el ADN que sufrimos a lo largo del día.
Se trata sólo de un estudio, por lo que aún no comprendemos el mecanismo que subyace a estos cambios. Sin embargo, hasta ahora, la investigación sobre el ayuno es muy prometedora.
Otros efectos del ayuno sobre la salud
Existen otros estudios que demuestran los efectos positivos del ayuno, incluso del ayuno de corta duración, como el ayuno intermitente. Un estudio demostró que el ayuno intermitente reduce el proceso de envejecimiento de nuestros vasos sanguíneos, previniendo eventos devastadores para la salud como ataques al corazón y derrames cerebrales. También parece activar un “interruptor metabólico” que ayuda a reparar el revestimiento de nuestro tracto gastrointestinal, lo que es especialmente importante para las personas con digestiones delicadas.
Muchas personas recurren al ayuno intermitente para perder peso. Aunque al principio creíamos que la restricción de alimentos era la causa de la drástica pérdida de peso que se observa con este plan de alimentación, ahora sabemos que no es así. Se han realizado varios estudios en los que animales de laboratorio divididos en grupos de alimentación libre y grupos de ayuno intermitente han sido alimentados con la misma cantidad de comida. Los grupos de ayuno intermitente pierden peso de forma fiable y más rápidamente. Además, muestran cambios metabólicos que los exponen a un menor riesgo tanto de diabetes como de obesidad. Esta pérdida de peso parece deberse, al menos en parte, a cambios en el ritmo circadiano.
¿Es el ayuno intermitente adecuado para cada persona?
El ayuno intermitente es algo más que una dieta de moda. Se trata más bien de un cambio significativo y sostenible en los hábitos alimentarios que puede tener diversos efectos positivos para la salud. Si se trata de una persona como muchas otras que acaban de conocer los beneficios del ayuno intermitente, es posible que se pregunten si es adecuado para ellos.
Los beneficios para la salud de esta dieta son evidentes y, de hecho, supondrán una ventaja para la mayoría de las personas, ya estén intentando perder peso o simplemente mejorar su salud. Aunque muchas personas encuentran que el ayuno es un reto en las primeras semanas, la mayoría se adaptará rápidamente al nuevo plan de alimentación de tiempo limitado.