Ya sabemos que los arándanos están repletos de vitaminas y nutrientes que aportan una amplia gama de beneficios para la salud. Según un nuevo estudio, ciertos compuestos de los arándanos protegen la salud del corazón e incluso pueden ayudar a prolongar la vida.
Un nuevo estudio revela que los arándanos protegen la salud del corazón
Un proyecto conjunto, que reunió a investigadores de la Universidad británica de East Anglia y la Universidad de Harvard, analizó cómo afectaba el consumo de arándanos al desarrollo de enfermedades cardiacas y diabetes de tipo 2. La investigación pretendía determinar cómo afectaba el consumo de arándanos al síndrome metabólico. El síndrome metabólico es un término utilizado para describir una situación en la que un individuo padece hipertensión, obesidad e hiperglucemia. Los niveles elevados de triglicéridos y colesterol también son comunes en las personas que padecen síndrome metabólico. Cuando estas afecciones están presentes durante un periodo prolongado de tiempo, el individuo desarrolla un riesgo mayor de padecer enfermedades cardiovasculares y diabetes de tipo 2.
En el pasado se descubrió que las personas que consumían arándanos con frecuencia presentaban un riesgo menor de desarrollar diabetes de tipo 2 y enfermedades cardiovasculares. El profesor Aedin Cassidy, que dirigió el estudio más reciente, sospechaba que esto se debía a la presencia en los arándanos de un compuesto llamado antocianina. Las antocianinas son flavonoides hidrosolubles que pueden afectar a la pigmentación de las plantas en las que se encuentran. También se ha descubierto que las antocianinas reducen los riesgos de muerte prematura por todas las causas.
¿Pueden los arándanos ayudar a las personas de riesgo?
El último estudio se realizó para averiguar si las personas que ya corrían riesgo de desarrollar cardiopatías y diabetes de tipo 2 podían beneficiarse del consumo regular de arándanos. Los investigadores reclutaron a 115 voluntarios. Todos los participantes tenían entre 50 y 75 años, eran obesos y se les había diagnosticado síndrome metabólico.
Dado que el estudio de seis meses se había diseñado para determinar si los arándanos protegen la salud del corazón, era importante que los participantes consumieran una cantidad suficiente de arándanos. A efectos del estudio, se utilizó un polvo de arándanos para simular los arándanos frescos. El primer grupo recibió el equivalente a una taza de arándanos frescos. A un segundo grupo se le dio el equivalente a media taza de arándanos frescos y a un tercer grupo se le dio un placebo de polvo liofilizado hecho para parecerse al polvo de arándanos dado a los dos primeros grupos.
Antes de iniciar el estudio, cada participante se sometió a pruebas de función vascular, resistencia a la insulina y estado lipídico. Los participantes también fueron sometidos a pruebas al final de los seis meses. Se observó que los participantes que consumían una taza de arándanos al día presentaban una mejora de la función vascular. Además, mejoró la rigidez arterial. En general, se determinó que este grupo experimentó un descenso del doce al quince por ciento en el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Dado que el grupo que consumía media taza de arándanos al día no presentaba cambios en la salud cardiovascular, se llegó a la conclusión de que era necesario un mayor nivel de consumo. Los investigadores principales del proyecto llegaron a la conclusión de que las personas con problemas de obesidad necesitaban una mayor cantidad de arándanos para obtener beneficios para la salud. El consumo de arándanos no afectó a otros aspectos de la función vascular, como los niveles de presión arterial o la resistencia a la insulina.
¿Qué papel desempeñan las antocianinas?
Los investigadores creen que los arándanos son especialmente beneficiosos para la salud del corazón debido a la gran cantidad de antocianinas que contiene esta fruta. Cuando consumimos arándanos, el organismo transforma las antocianinas en una serie de compuestos químicos beneficiosos para las bacterias del microbioma intestinal. Una vez que llegan a esta parte del intestino grueso, los científicos creen que los compuestos ayudan a promover un metabolismo más saludable. En experimentos de laboratorio, se descubrió que un compuesto producido a través de este proceso, el ácido siríngico, beneficiaba a las células endoteliales vasculares del organismo.
En otro experimento, se administraron dosis proporcionales de antocianina a ratas. Uno de los compuestos producidos fue el ácido vanílico, que redujo la tensión arterial. Esto puede indicar que los arándanos pueden ser eficaces para ayudar a los pacientes a tratar la hipertensión, aunque es necesario seguir investigando.
Aunque los arándanos poseen altos niveles de antocianina, no son los únicos alimentos que contienen estas sustancias altamente beneficiosas. Otros alimentos que contienen antocianina son:
- grosella negra
- frambuesas (rojas o negras)
- moras
- col roja
- ciruelas
- rábano rojo
- zanahoria negra
- patata morada
La investigación sobre los beneficios para la salud de los arándanos es especialmente prometedora, porque los métodos actuales para tratar el síndrome metabólico son complicados. Principalmente, el tratamiento requiere cambios en el estilo de vida para evitar que la enfermedad empeore. Esto significa adoptar una dieta basada principalmente en vegetales, con especial énfasis en las grasas monoinsaturadas, y aumentar la actividad física diaria.
El tratamiento se complica al tener que abordar las afecciones individuales que definen el síndrome metabólico. Por ejemplo, puede ser necesario tratar por separado la hipertensión, la glucosa y el colesterol. Esto puede requerir la administración de varios medicamentos y el seguimiento de los efectos para determinar si la condición del individuo está mejorando o no.
Si nuevas investigaciones demuestran que las antocianidinas son tan beneficiosas como creen los investigadores, podrían eliminarse algunos de estos medicamentos. Aunque todavía desconocemos todos los beneficios que aporta el consumo de arándanos, ya parece que esta fruta debería formar parte esencial de cualquier dieta saludable.