Los ciclos de sueño irregulares y los niveles de melatonina pueden tener un efecto perjudicial en todos los aspectos de la salud, pero su conexión con la resistencia a la insulina y la diabetes de tipo 2 es especialmente fuerte. Hace poco, unos científicos buscaron un mecanismo que pudiera vincular estos dos problemas de salud aparentemente inconexos. Sus investigaciones indicaron que el receptor de melatonina 1B parece ser la conexión, un descubrimiento que abre una puerta a nuevos e innovadores tratamientos y medidas preventivas.
Trabajo por turnos, melatonina y diabetes
El trabajo por turnos se ha relacionado con diversas enfermedades, entre ellas trastornos endocrinos como la diabetes de tipo 2. La melatonina parece desempeñar un papel fundamental en esta relación. La melatonina parece desempeñar un papel fundamental en esta relación. Producida en respuesta a la oscuridad, la melatonina es un factor que interviene en diversas reacciones endocrinas. Es una señal para el cuerpo de que estamos a punto de dormir, y que el cuerpo puede comenzar la reparación celular y otras actividades que se producen cuando estamos profundamente dormidos.
Cuando las personas trabajan por turnos a horas intempestivas, su exposición a la luz natural se ve afectada. Pueden dormir durante el día, cuando la luz solar es alta, y pasar las tardes o noches bajo luces artificiales brillantes. Esto conduce a una producción desordenada de melatonina. Pero, ¿cómo pueden contribuir los cambios en los niveles de melatonina a un trastorno de la insulina y el azúcar en sangre como la diabetes de tipo 2?
Receptor de melatonina 1B: ¿el eslabón perdido?
La melatonina, como muchas hormonas, ejerce sus efectos activando los receptores celulares para desencadenar la actividad dentro de la célula. Una nueva investigación ha descubierto que un receptor, el receptor de melatonina 1B, desempeña un papel en la respuesta del organismo a la insulina. Cuando se activa este receptor, las células responden menos a la insulina. Esto produce un aumento del azúcar en sangre, que normalmente es una respuesta saludable durante la noche. Las personas que duermen por la noche necesitan conservar el azúcar en sangre para no sufrir una hipoglucemia durante el ayuno nocturno. Sin embargo, esta respuesta puede ser desadaptativa en las personas que trabajan de noche, ya que suelen comer durante la noche.
Esto explica una parte de la relación entre la melatonina y la diabetes, pero aún hay otro giro. Algunas personas tienen una variante genética del receptor de melatonina 1B en lugar del que está presente en la mayoría de la población. Estas personas tienen una mayor respuesta a la melatonina y, por tanto, aún más resistencia a la insulina durante los momentos de producción de melatonina. La producción desordenada de melatonina unida a niveles elevados de melatonina en momentos en los que están comiendo, como ocurre en los trabajadores por turnos, puede ser especialmente destructiva para el organismo de estas personas. Con el tiempo, los periodos regulares de resistencia a la insulina pueden provocar diabetes de tipo 2. Esta hipótesis está respaldada por otras investigaciones que indican que esta misma variante genética está relacionada con una mayor prevalencia de diabetes de tipo 2.
Conexión entre genes, estilo de vida y enfermedad
Se supone que la diabetes de tipo 2 tiene un componente genético porque tiende a ser hereditaria. Incluso si no se tienen en cuenta los factores relacionados con el estilo de vida, algunas personas simplemente tienen un riesgo mayor. Los factores relacionados con el estilo de vida también desempeñan un papel importante, pero no puede descartarse la influencia de los genes. Algunas personas están genéticamente predispuestas a desarrollar resistencia a la insulina y otras enfermedades del metabolismo de la glucosa.
Los investigadores sugieren que esta nueva información puede utilizarse para ayudar a las personas portadoras de esta variante genética a prevenir la aparición de prediabetes o diabetes. Para quienes tienen la forma variante de melatonina 1B, es aún más importante tener ciclos de sueño regulares y mantener un ritmo circadiano natural.
¿Puede ser el sueño la mejor medicina?
Parece que para muchas personas dormir bien es especialmente importante para mantener una buena salud. Sin embargo, el trabajo por turnos es una parte necesaria de nuestra sociedad, ya que la población necesita ciertos servicios disponibles las 24 horas del día. Ayunar durante las horas nocturnas y restringir la ingesta de carbohidratos a las horas de luz podría prevenir algunos de los efectos nocivos de la resistencia a la insulina causada por una variante del receptor de melatonina 1B. Además, las personas con riesgo genético de diabetes de tipo 2 podrían evitar el trabajo por turnos.
El número de personas prediabéticas o diabéticas en el mundo occidental no deja de crecer. Identificar a las poblaciones de riesgo, así como los comportamientos que aumentan su riesgo, puede ayudar a frenar la marea moderna de enfermedades endocrinas. Los nuevos avances en cronobiología están ayudando a científicos y médicos a comprender la relación entre la melatonina y la diabetes con la esperanza de ofrecer una mejor atención a las personas que la necesitan desesperadamente.